EL AÑO DE CONSOLIDACIÓN
GUADALAJARA, Jalisco (31/Diciembre/2018).- Termina el 2018 para los Leones Negros de la Universidad de Guadalajara, un año futbolístico en donde hicieron vibrar el corazón de su afición jugándose el alma en cada partido, logrando clasificar a la Liguillas en dos torneos consecutivos, algo que no hacían desde cinco años atrás.
Los universitarios pudieron hacer un 2018 de ensueño pese a las múltiples dificultades, pero una Final perdida y una eliminación en Cuartos de Final en el Clausura y Apertura 2018, lo evitaron, aún así el Equipo Que Nació Grande resurgió de las cenizas tras varias Temporadas de claro oscuros para ser un equipo protagonista en el Ascenso MX, todo gracias a los esfuerzos puestos en cancha y el juego colectivo que tanto los caracterizó.
CLAUSURA 2018
Lo más sobresaliente para los Melenudos en el primes semestre fue que no conocieron la derrota en sus últimos nueve partidos en el Estadio Jalisco, la osadía comenzó ante Venados en la Jornada 5, desde ahí la confianza y unión de equipo fue creciendo y con ellos mejore s resultados, una goleada sobre Atlante y victorias ante rivales directos por la clasificación, Zacatepec y Atlético de San Luis, encuentros de grandes emociones que termino en victoria en los minutos finales, fiel reflejo de la convicción y la garra que tanto había buscado el cuadro universitario que reconquistó también a la afición que se fue involucrando con el equipo conforme fue avanzando el torneo. Durante la fase regular, Leones Negros también obtuvo resultados positivos de visita, entre los que destacan los empates en las complicadas aduanas de Hermosillo y Celaya y la victoria ante el que en ese momento era el campeón reinante, Alebrijes.
Ya en Liguilla, Leones Negros tuvo una espectacular remontada ante Atlante, pues tras caer en la ida, en un inolvidable Domingo de Leones goleó 4-0 a los Potros; en Semifinales el rival fue Oaxaca y nuevamente los felinos salieron victoriosos y lograron avanzar por criterio de gol de visitante, para la Final llegó la derrota más dolorosa, en Tapachula, Cafetaleros superó a UdeG por la mínima diferencia que a la postre fue la diferencia, pues el empate en la vuelta en la cancha del Monumental dejó con las manos vacías y el corazón roto a la manda universitaria.
El cuadro universitario consiguió en todo el torneo 30 goles a favor por 26 en contra, contando la Liguilla, para un total de 8 victorias, 7 empates y solo 6 derrotas en todo el torneo.
APERTURA 2018
El receso veraniego y la época mundialista le dio tiempo suficiente a la nómina de Jorge Dávalos para preparar el Apertura 2018, pero dicen que los malos hábitos son difíciles de erradicar, y eso más la carga de lidiar con la resaca de perder la Final en casa no había desaparecido.
Tres meses después, el equipo de la Universidad de Guadalajara volvió a padecer el inicio de campeonato, al grado de llegar a la mitad del mismo situados en el fondo de la Tabla General y con problemas de cociente, con solo un punto en sus primeros cinco cotejos y encontrando su primer triunfo hasta la Fecha 7, con un dejo de revancha, frente al que había sido su último gran verdugo: Cafetaleros.
Los primeros tres puntos conseguidos en Tapachula emularon el guion de los más recientes torneos en La Primavera, le regresaron la confianza al grupo y representaron la punta de lanza para un repunte en la segunda mitad del certamen. Cuatro victorias en nueve partidos y afianzarse como una de las mejores ofensivas, a pesar de sonoros tropiezos Culiacán y Tampico, catapultaron a los Melenudos a su segunda calificación consecutiva, misma que lograrían en la última jornada, en el último partido de la fase regular y en el Estadio Jalisco goleando al Celaya. El mismo script de la última calificación.
Ya instalados en los Cuartos de Final, el cuadro tricolor tendría que voltear a la frontera norte del país para enfrentar al superlíder general, la mejor defensiva y al cuadro que había conseguido el récord de puntos de la categoría: Juárez FC.
Leones Negros se desinhibió en el duelo directo, mostrando el futbol que lo llevó a la lucha por el título y puso contra las cuerdas a los fronterizos, pero una vez más, el no aprender de los errores previos sería su acabose, al no aprovechar tener la ventaja en dos ocasiones en la eliminatoria y terminaron con el sueño al empatar en el marcador global y siendo eliminados por criterio de peor posición en la tabla, casi como un reproche a su irregularidad en el resto del torneo.
De esta manera, el noveno año melenudo desde su regreso al profesionalismo será recordado como uno de consolidación, pues más allá del sinsabor de quedarse a un paso de la gloria, la Universidad de Guadalajara recuperó la filosofía ganadora, volvió a posicionarse como un equipo protagonista y de cara al 2019 ha establecido un proyecto bien fundamentado para regresar a la institución al lugar que la historia le reclama: la Primera División.
Comparte esta noticia